Por el camino...

No importa el camino, lo que importa es como vivas tu camino, de ti depende, habrá piedras que te harán tambalearse, resbalar, caer, pero tendrás que equilibrarte o levantarte, nadie te levantará, pocos se detendrán a darte la mano, menos se quedarán a tu lado, habrá piedras que te lastimaran, quizá hasta sangrar, esas en algún momento dejarán de doler, pero nunca olvidar, siempre sentirás la cicatriz, es vital caminar en solitario, quizá algún tiempo estarás acompañado, poco tiempo, mucho tiempo, quien sabe, pero al final caminaras solo, no hay que temer, caminar solo no es malo, hacerlo te permitirá ver mejor, ver sus tonalidades, desde una absoluta obscuridad hasta los tonos del arco iris, lo importante es no bajar la vista, te perderías de las maravillas que hay, tormentas espeluznantes, amaneceres bellísimos, nevadas increíbles, olas tranquilizantes, vientos huracanados, mantén la vista al horizonte, a veces miraras atrás, y pensarás que no has caminado mucho, pero cada paso dado, fue tu esfuerzo el que te hizo avanzar, abra colinas qué pensaste que no lograrías subir, ahora las vez y solo sonreirás y seguirás adelante, el final del camino te puede sorprender, no sabrás cuando terminara, pero si crees que no caminar te evitará encontralo, estás equivocado, el te encontrará, así que, ponte de pie, levanta la vista y empieza a a caminar que lo mejor está por delante de esa colina...